Prof. Jesús Tallerías C.

Desde que el conocimiento es resultado de un esfuerzo cognitivo, estructurado con el conjunto de elementos que constituyen el andamiaje necesario y suficiente, para acceder a la verdad en torno al objeto que se estudia, surgieron las ideas epistemológicas.

El saber «episteme», precursor del conocimiento científico que deviene en ciencia propiamente dicha, se diferencia muy claramente del saber «doxa», que tiene un carácter opinático y de sentido común. A este último no hay que probarlo ni demostrarlo porque en sí mismo es evidencia y demostración, puesto que es operante per se.

El saber que se supone científico debe ser adecuado, en tanto referente teórico, a su objeto de estudio que se construye como un correlato empírico que se expresa en variables, indicadores, índices, etc., manifiestos en datos cuantitativos e informaciones cualitativas o ambas a la vez. El saber científico es tal, porque es demostrable y comprobable todas las veces que sea necesario, con la ayuda del recurso del método científico general, los métodos particulares del área o esfera del saber, los métodos especiales en lo que respecta a la cualidad especial del objeto de estudio, las técnicas pertinentes para obtener la información que señalan los indicadores, los procedimientos más idóneos para evitar los obstáculos epistemológicos. Estos últimos pueden provenir del sujeto cognoscedor, del objeto cognoscible o de la relación cognoscitiva.

La razón de ser primaria de la Epistemología consiste en resolver hasta qué punto las verdades científicas son realmente verdaderas. Esta es en esencia la teoría de la verdad científica en tanto resultado, o teoría del conocimiento científico, en cuanto proceso. De ahí la importancia que tienen los llamados obstáculos epistemológicos.

El eterno problema objetividad/subjetividad, muy evidente en las ciencias sociales y humanas, pero también perceptible en las ciencias naturales y matemática; y sus múltiples derivaciones y combinaciones, es una cuestión epistemológica. Tanto en ciencias sociales como en ciencias naturales hablamos de probabilidad porcentual o percentil, sin embargo, los porcientos en el discurso físico químico o bioquímico son más creíbles, o al menos más tomados en cuenta que en lo socio-histórico o lo socio-político. El problema radica en la relación sujeto-objeto. En el último aspecto subyace el interés; se es sujeto y objeto a la vez y eso plantea un serio obstáculo epistemológico. Este se reduce considerablemente cuando el objeto de estudio le resulta ajeno al sujeto investigador. Él no se siente parte involucrada directamente en el asunto problematizado. Se supone que puede y tiene que ser más objetivo y, en consecuencia, preciso.

La Epistemología es una rama de la filosofía que se ocupa del estudio del conocimiento científico y de sus fundamentos, métodos y límites. En otras palabras, examina cómo los científicos obtienen conocimientos válidos, cómo se justifican y cómo se aplican a la realidad.

La precisión en el conocimiento científico es fundamental pero, como mencionaste, es difícil lograr la precisión absoluta. La ciencia a menudo opera con aproximaciones, como el valor de Pi, que son suficientes para la mayoría de los propósitos prácticos.

La Epistemología también se ocupa de analizar y cuestionar la metodología científica, sometiendo a la teoría, los métodos y las técnicas al escrutinio crítico. Esto ayuda a establecer la validez de los conocimientos científicos y su aplicabilidad a nuevos hechos y situaciones.

El estudio epistemológico aborda diversos aspectos, desde cuestiones lógicas hasta éticas, pasando por aspectos semiológicos y semióticos, pero siempre centrándose en la metodología. También examina la evolución de los conceptos científicos, como el átomo, cuya definición ha cambiado drásticamente desde su concepción original.

En la investigación de fenómenos sociales, la Epistemología enfrenta obstáculos adicionales, como las actitudes y comportamientos de los sujetos investigados. El investigador también puede verse involucrado en los procesos estudiados, lo que crea complicaciones adicionales.

Los científicos, como seres humanos, también pueden verse influidos por prejuicios, estereotipos, ideologías políticas y cosmovisiones, que actúan como obstáculos epistemológicos en el proceso de conocimiento científico.

El problema del método es una preocupación central en la Epistemología, ya que ningún método es infalible y todos son perfectibles. El mejor método es aquel que permite la mayor aproximación posible a la verdad, verificable mediante los recursos del propio método.

La Epistemología también se ocupa de la verificación tanto del resultado como del proceso del conocimiento. Esto implica que la credibilidad de los resultados depende en gran medida de la confiabilidad del proceso de investigación.

En resumen, la Epistemología es esencial para garantizar la calidad del conocimiento científico y tecnológico y para evaluar la metodología empleada en su obtención. Aunque muchos campos pueden aspirar a alcanzar un estatus epistemológico, solo algunos logran convertirse en ciencias formales con un estatuto epistemológico definitivo.

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